Se va yendo mi voz (...)

Se va yendo
mi voz…
su resonancia clara.

Mi voz…
desnuda
se pierde
en la maleza.

Mi voz…
sin salida,
rendida,
adormecida,
quedó vacía
de letras.

Seca y muda,
cual temblor
de la rama
que lucha
contra las ráfagas
de otoño.

Sola y perdida.

Sin eco alguno,
se deshace
en el agua
como un papel
en blanco.

Diluida…
falsa nieve
abatida,
derrama
su mutismo
estático
como ave
que no vuela,
vencida
en su canto.

Apenas un latido,
callado grito
abortado.

Tan sólo…
un hilo fino
(vital,
escuálido
y rebelde)
permanece
horadando la piedra
del silencio,
trascendiendo
impasible,
los espacios de mi aliento…
apenas inaudible.

Octubre 2024

Foto: De mi amigo Julio Hidalgo Ardila. Por el Valle del Ambroz, Cáceres.

29 Me gusta

La energía va y viene; a veces hay que vaciarse para que lleguen nuevas y reconfortantes olas, pero esto tiene la poesía que es una pomada -si quieres un acomodo- para vacíos y también plenos. Esa lírica no puede ser otra cosa que una sed de tanta belleza que nos queda por beber.
Un abrazo y buen finde paisana.

1 me gusta

La voz , como seña de identidad, se va apagando como la vida misma, hasta su mínima expresión, como ese hilo de agua en el caño de la fuente.
Hermoso poema e imagen se acompañan entre sí.
Un buen fin de semana María.
:hugs::hugs::rose:

2 Me gusta

Vaya hermoso poema para reflejar la agonía de la voz que se disuelve en el silencio.

Es toda una lucha íntima por permanecer aunque sea apenas un hilo de resistencia.

Siempre maravillosa tu poesía estimada poetisa. Un abrazo.

1 me gusta

Una joyita lírica tu poema. Una brillante metáfora que, a través de la voz, nos habla de la levedad del yo y de su carácter perecedero frente a la enormidad del cosmos.

3 Me gusta

La voz no es la palabra, ni el habla en si, sino una extensión de la cadena significante , según Lacan “la voz es un objeto que surge cuando se rompe el significante para asignarle un lugar al sujeto”; para mi es el músculo vibrando por efecto del sentimiento a causa de un deseo.
«Tu voz se adentró en mi ser y la tengo presa
tu voz que es tañer de campanas, al morir la tarde
tu voz que es gemir de violines en las madrugadas.
Es el divino poder que tienes para enternecer» Ramón Cabrera.
Aplausos Linda María.

2 Me gusta

!Hermosamente lírico! :rose: a veces queremos gritar pero la voz simplemente se pierde pero como lo escribiste… “permanece horadando la piedra”… !Hermoso, mi admirada poetisa !

Besitos,
:kissing_heart:

2 Me gusta

Una extraordinaria composición que nos habla de ese yo interior y como este se va apagando y como la voz pelea por seguir gritando …
Maravilloso Maria

"Tan sólo…
un hilo fino
(vital,
escuálido
y rebelde)
permanece
horadando la piedra
del silencio,
trascendiendo,
impasible,
los espacios de mi aliento…
apenas inaudible.

2 Me gusta

Que no se seque nunca el manantial del decir y la palabra…
Gracias, amigo! He estado atareada con otras cosas y no te contesté…
Abrazo gordo para nuestra Extremadura, ahora estará contenta con estas aguas de octubre. :sweat_drops: :orange_heart: :yellow_heart: :hugs: :kissing_heart:

1 me gusta

Tienes razón…con tanto escrito y algunas circunstancias, observo que ya no encuentro qué decir…y cómo hacerlo.
Muchas gracias, José Antonio! Fuerte abrazo! :hugs:

1 me gusta

El eco de una voz que se extingue en su propio silencio. Uff, que buen poema, me ha encantado :sparkles::sparkles::sparkles:

1 me gusta

Muy lindas letras :heart_eyes: Saludos Maria

1 me gusta

Muchas gracias. Resistiremos…poeta!
Abrazos, Alex.

1 me gusta

Muchas gracias, por tu apreciación, Antonio. Resistiremos, aún así…
Buena semana!

Bienvenida mi querida María, es un gusto leerte nuevamente. Y esta frase tan significativa como todo tu maravilloso poema. Esa frase encierra el deseo y la esperanza por no sucumbir en el total silencio que es la muerte misma o que puede ser; esa rebeldía es esa esperanza, es esa lucha entre la vida y la muerte y mientras haya vida hay esperanza, aunque la luz casi que este agotada, y aunque estemos deshechos y/o en ruinas, aun hay esa pequeña fuerza que nos anima a seguir y/o como el ave Fénix a resurgir. Que tu voz siempre ilumine con el cantar de tus rimas por siempre con la fuerza y luz de tu esencia con el halo real y existente de por ejemplo Sor Juan Inés de la Cruz. Un abrazo de oso.

2 Me gusta

A veces creemos sentir que nos apagamos, pero sienpre hay un hilillo del que (y con el que) tirar.

Magnifico poema y foto María :clap:t2::clap:t2::clap:t2::clap:t2::blush:

2 Me gusta

Cuando la voz no quiere seguir adelante, se mantiene viva la mente y los recuerdos, que son como tesoros que se convirtieron en palabras y el presente que es un cuadro que se pinta ante nuestros ojos y que con materializarlo en nuestro interior a veces puede ser suficiente.

Cuando el manantial de la palabra atraviesa la sequía, el espíritu del poeta permanece firme como un faro en la tormenta.

Me encanta la melancolía que arropa este poema.

Un saludo.

2 Me gusta

Gracias mil por ese comentario tan completo sobre la voz… Me gustó más la última cita.:heart_eyes:
Abrazo fuerte, amigo.

Muchísimas gracias, querida Selene! Abrazos para allá!:hugs::hugs:

1 me gusta

Gracias por esa hermosa apreciación de mi poema. :rose:
Abrazos, amigo!

2 Me gusta