En ritual de litúrgica altivez.
Un tambor, proclama su hecatombe
no dice ¡buena noche yenyeré!.
El tambor de hoy, dice candombe.
«Ese que ta atra, ta tra, ta tra, ta tra»
Anatema de tambor bantú
negando el rastro más lejano
de su enardecida negritud.
Hondo canta la hembra
en la misma hondura é la mitad del Plata.
San Baltazar, tamborilero
mensajero del septentrión de áfrica.
protege este seis de enero
al barrio de cambá cuá
«Racutú cuplá cuplá»
El chico subyugado al maderamen
de su pasado espiritual costero
las nuevas urbes alucinan con su imagen
y amenizan madrugadas los cumbieros.
«Trucu tu cutú cuplá cuplá»
Asteriscos de colores
ebullen en la nocturnidad del santo.
Parece renacer con los tambores
aquel embrión que fuera profanado.
—Ra cu tu cu plá—
Tambor emancipado
sin concebir que la libertad valiera tanto
en unos, y mucho menos en el otro.
La música es por cuenta de los santos
y el baile, disfrute del devoto.
Efectivamente dice candombe, y dice cumbia, dice baile a su ritmo.
Todos los tambores tienen su cadencia, los del trópico mueven las caderas entre cadenas y los del sur la mueven en libertad.
Me encantó ese lenguaje que cada cual habla a su modo, pero que todos llevan en su ADN. Tqm
Desde acá celebro y acompaño con percusiones ese ritmo que destila inspiración, improvisación. El sonido del tambor, el batir de las manos sobre el cuero, son las formas genuinas e imitar la naturaleza. La matriz de la música
Mis felicitaciones, amigo Ludico.
Me has hecho recordar a nuestro Nicolás Guillén. Tu poema está lleno de sabrosura y originalidad con esos onomatopéyicos sonidos de los tambofres de nuestros ancestros; por que en nuestras tierras, de las que somos oriundos, el que no tiene de congo, tiene de carabali.
Fuerte aplauzo.
Abrazos
Uff que bello!!! que onomatopeyas tan bien conseguidas, llegan hasta aquí el lenguaje de los tambores , me quedo con la música y con el baile amigo, nada como adentrarse con los pies y con el alma en un ritual ancestral a ritmo de tambores!!!
Gracias, muchas gracias por los cumplidos. Los tambores de candambe son una realidad sonora y cultural de la Argentina y el uruguay; en estos dias he estado leyendo artículos y algunos ensayos que niegan la existencia del candombe y de las poblaciones afro en estas latitudes. La lectura de estos párrafos se origina por un sueño que tuve, por las fiestas que celebran en el club bochistico donde siempre estan presente los tambores rompiendo el silencio enmlas madrugadas. Gracias por tu lectura.
Gracias @JDuque por tu amable visita y por el acertado comentario, en efecto la matriz de la musica tiene su origen en la naturaleza, por eso la dopamina en el cuerpo humano responde a los impulsos musicales con tal naturalidad, ya que lo que es natural incentiva la imaginacion y el disfrute. Gracias por tu lectura
Que gusto verte por aqui amigo Pedro, espero que tu salud este bien y tu família unida compartiendo los sueños y logros en paz y alegria. Una gran verdad esa de nuestro mestizaje afro.
Nicolas Guillen para mi es uno los referentes más auténticos de la poesia en latino america. Saludos con mucho afecto @Saltamontes .
Los tambores hablan cuando la voz escasea o tiembla; estuve soñando con tambores y tamborileros y se me ocurrió que un poema seria la terapia ideal para sanar esa obsesión.
Gracias Minada por tu constante apoyo. Saludos.
Créeme, no son cumplidos como tal , son comentarios reales , no sé como hacés para abordar esos temas complejos, único e interesantes, por eso me encanta cuando escribes, porque nos inundas de sapiencia y de paso nos llevas de la mano a recorrer tus temas.
Gracias por eso, te lo digo sinceramente.
Precioso poema! El lenguaje de los tambores, sea los que sean, es muy hondo, profundo, repetitivo, rítmico. Su sonido siempre tiene algo de atávico, ancestral…de ceremonia.
Aquí en España se utilizan en diversas fiestas religiosas y profanas y existen bastantes tipos.
Me gustó mucho con esas onomatopeyas que añadiste.
Un abrazo, Ludico.
El sonido del tambor es como un corazón agitado
Aquí tenemos diversas celebraciones anuales donde solamente la música la ponen unos 4000 bombos y tambores, por ejemplo en Calanda Calanda es una de las protagonistas de la Ruta del Tambor y el Bombo del Bajo Aragón. Allí se rompe la hora el mediodía del Viernes Santo y se fabrican los instrumentos de percusión que siempre fascinaron a Luis Buñuel, quien logró dar fama internacional a la fiesta, mucho antes de que fuera declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad
Esta es la cumbia con la que soñaba, la busqué en internet y es colombiana ( no Argentina) el autor es Rafael Mejias Roamani y se grabó en 1964 ( el mismo año que nací)
《…un enjambre de estrellas desde el cielo bajaba
Carrusel de colores parecia la cumbiamba》
Agradecido eternamente @mariaprieto por el aporte de tu sensibilidad poetica en esta pieza, cuyo proposito inicial fue deshacerme de un sueño recurrente que tenia con tambores y cambias, ocurrió que en tránsito de investigación sobre la cumbia en Argentina, me encontré con la negación del candombe como expresión cultural en estas tierras, asi que cambie el sujeto de la cumbia al candombe, porque siento qie es una expresión vigente y viva en toda la región. Gracias por tu valiosa lectura.
Contento de recibirlo en esta mesa humilde de tambores @pepesori, en nuestros lares los tambores suenan por motivos religiosos o festivos con esa frecuencia ritmica que usted menciona, pero el tambor es universal, lo que varia con la geografia es su construcción y manera de ser tocado, el vinculante siempre es el ritmo del corazón, tanto así que los verdugos lo usan en los fusilamientos y más al norte de américa para convocar a la guerra. No obstante mantengo en la imaginación el grato sonido de fiesta, rumba, guaguancó, candombe, fulia, gaita etc.
Este poema fue una necesidad de liberarme de un sueño recurrente con una cumbia y repique de tambores. Gracias por su lectura y atento comentario. Saludos.