Fue escucharte, músico
y agarrarme a tu luz
rebosante de melodía,
tal vez,
para apuntalar a la mía
demasiadas veces,
alojada en la sombra
a pesar,
y con el arrojo
de reflejarte tal cual
sin grietas,
ni máscaras,
con esa voz caduca
trepando por tus venas
al filo del adiós
Fue escucharte, músico
y tejerme en tu palabra
con el hilo del amor
prendiéndome,
en respirar mis instantes
mis fugaces instantes
con el fuego
que dance en mi alma
alentando,
siempre alentando
la sonrisa de la vida
Fue escucharte, músico
y recordarme
desde tus canciones
deificando mis sueños
hasta recordarte
con esta, mi última pupila
allí, dónde inmortalizas
en “El sitio de mi recreo”
Gracias Pau Donés por tu música y tu honesto y generoso testamento vital. Ref “ El sito de mi recreo” (Canción Antonio Vega)
Por supuesto que siempre existe una fuente de inspiración para aterrizar nuestros poemas. En esta ocasión Pau Donés ha sido tu motivación.
Si a lo anterior agregamos que te fascina la música, ¡ tu poema ha quedado como una bella
Oda al músico!
¡Abrazos cariñosos, querida Ana María!
Muchas gracias poeta, así es esta vez ha sido mi fuente de inspiración, en un tono más entristecido, pues se ha ido muy joven, pero sí la música en general es mi cómplice y mi inspiración!!! Abrazos musicales!!!
Muchas gracias amiga, por tu sentido comentario, si la música en general y según mi estado de ánimo es para mi, nunca mejor dicho el sitio de mi recreo, el cómplice con mi sentir, efectivamente un pequeño homenaje en gratitud!!