Muchas gracias! Esas viejas puertas guardan la memoria de muchas vidas…que fueron.
Abrazo fuerte, querida Koro! 
Historias que están en la retina de infantiles ojos, recuerdos que se pegan muy dentro y quizá el alma sepa cómo recrear en su momento para llenarnos de sonrisas y felicidad.
Bonito relato!!!
Saludos, María.
1 me gusta
Es una prosa magnífica, en la que en mi opinión se entremezclan dos corrientes artísticas para ensalzar aún más la belleza del texto. Creo que hay una mezcla de realismo y naturalismo, con unos toques de realismo mágico. La descripción de las puertas y los espacios, es detallada y uno pareciera estar viéndolas, pero incluso vas mas allá de la realidad como si en algún momento se mirara esa realidad a través de un microscopio y al final entran en acción esos espíritus juguetones, que habitaron en algún momento la casa, a los que tú das vida y asomas por las cancelas, los patios y las ventanas de la casa. Veo tu obra como una mezcla de Benito Pérez Galdós, Vicente Blasco Ibáñez y Gabriel García Márquez(este último por los espíritus). Tu prosa es una gran obra, que mantiene anclado al lector de principio a fin y que le hace transitar caminos de realidad, misterio e imaginación. Me ha encantado leerte. Un saludo, María.
1 me gusta
Gracias, Martín. Abrazos!
La viejas casas tienen el aura de quienes las habitaron…
Un hermoso y generoso comentario el tuyo, amigo. Te lo agradezco mucho, pero mi prosa está a años luz de esos maestros grandes que citas…a los que admiro…
Un abrazo, Pedro. Buenas noches.
1 me gusta
Gracias por leerlo!
Abrazos y buena semana, Paco!
1 me gusta