Que difícil es libar la pena ajena, incluso sospechar su magnitud.
Precioso.
Besazo
Bellisimo,María!versos de transparencias y sutilezas del alma…un abrazo,poeta!!
Tienes mucha razón, amiga. Muy difícil!
Gracias mil!
Gracias, Silvi! Besitos.
El infinito vuelo de la poesía siempre en tu pluma.
Felicidades!
Muy bonito poema, María. Que bichejo tan poético la libélula, sobrevolando la pena…Muy buen poema. Un abrazo, compañera.
Gracias, guapa!
Muy poético y muy simbólico, da lugar a muchas creencias y supersticiones…
El algunas zonas de la India se relaciona con el alma y la muerte.
Gracias, José y perdón por el inciso…
Abrazo, amigo.
Me encanta pronunciar “libélula”. Es como ponerle unos pendientes de hojas que tintinean a la lengua.
Maravilloso poema, eres la maga de la serenidad
Bellos versos, abrazos
Qué bonitos y poéticos comentarios haces!! A mí también me gusta la palabra libélula, es una hermosa aliteración!
Siempre que la oigo, me recuerda a este verso de Rubén Darío en su Sonatina: “la libélula vaga de una vaga ilusión…” Nos dieron caña con eso en el bachiller!! jajajaja
Un beso, poeta!
Muchas gracias, Varimar! Abrazo para ti también.
Muchas gracias, Nora!! Un vuelo muy delicado…como sus alas.
Besitos!!
María me encanta el poema, tiene un delicado fluir, te guardo en favoritos.