Alcarrache…moro.
Vienes pisando tu huella.
Alfanjes y media luna
en la noche de tus aguas
se reflejan.
Río de mi infancia.
Alameda fragante y misteriosa
tantas veces recorrida.
Historias permanentes
en sus troncos ancestrales.
Sombras y susurros
escondiéndose anhelantes.
Mampolín
(como el gigante de mis cuentos)
hacia ti su capa extiende
de jaras, de jaguarzos y de brezos.
Aroma a yerbadulce,
a rosadas adelfas.
Una brizna de hinojo entre mis labios.
Puente de piedra.
Por la tarde
mil cantos de ruiseñores
en los recodos del aire.
Salvaje en tus crecidas del invierno.
Oculto en los estíos.
(Apenas los tamujos
delatan tu presencia.)
Arrecia el frío.
Charcos de vida.
“Doña María",
agua clara, transparente, fría.
“Membrilleros”,
caminatas de verano,
blanca arena, chapoteos.
Sabores agridulces a camuesas,
en el camino, viñedos.
Parajes de molinos derruidos,
entre las zarzas, secretos.
Tristes y ausentes cigüeñas
por tus orillas pasean.
Pasaderas…
aventura infantil emocionante.
Frontera.
Los milanos, en círculos concéntricos,
sobre el encinar planean.
Y te vas…
Y me llevas…
siguiendo tu huella.
(Sombras negras de toros nos vigilan)
Media luna,
en la noche de tus aguas
se refleja.
Foto: Río Alcarrache. Badajoz. Corredor Ecológico y de Biodiversidad.
turismo.badajoz.es.