Era muy entrada la madrugada, cuando el sobresalto y el dolor me despertó:
Soñaba que de pronto una anciana, había aparecido en mi habitación de la nada, vino a sentarse en mi mesita de noche, muy cerca de mi almohada… Así, empezó una charla gentil, había un fuerte olor a moho. Yo miraba con interés sus uñas, muy largas y curvas que me hacían pensar en raíces retorcidas. Extrañada, en el sopor de quien se acaba de despertar, más bien sorprendida. Intentaba pensar a quién me recordaba su estampa, desplegando amabilidad blofeaba; decidí, que se parecía a la tía donosa de mi amiga de siempre; pero recordé de su Alzheimer y entendí que no era ella.
Algo la hizo presentir que se había delatado. Ya para incorporar su redonda humanidad, apoyó sus pezuñas sobre mi pecho, de lado del corazón y presionó fuerte, le dije que dolía, que parara, pero era como si deseara poseer mi corazón y extraer con sus garras algún zumo misterioso… grité…grité adolorida y desperté.
En la noche húmeda
luna nueva de otoño
Gritos a oscuras
Gracias querida Hortensia, pero no lo hice tradicional. Ya que lo he rematado con un Haiku en lugar de Hokku. Algo muy raro en mi. Porque usualmente no se me dan los Haiku en el Haibun. Besitos dulces.
Gracias querida Ana María, no hay mucho misterio, en realidad es que actualmente la bondad es sospechosa. Pero a veces, si resulta ser peligrosa. Trataba de mostrar las dos caras, pero no soy muy experta aún en eso. Y practicando. Jijiji. Gracias por comentar. Feliz fin de semana.
Será la magia de la argéntea luminosidad de la luna, la que lleve esos místicos sueños al posarse en nuestros rostros?
Por lo pronto, tu pesadilla culminó con la inspiración de tu lindo Haiku!
Abrazos cariñosos, Lisbeth!
¡Me encantó!
Es el primer “Haibun de Terror” que leo, y, por favor, los entendidos, discúlpenme si estoy diciendo una barbaridad.
Hasta ahora, en mi pequeño, limitado concimiento, había entendido el Haibun como una más de las composiciones japonesas referidas a la naturaleza, y así he redactado los pocos que he escrito.
Y ahora me encuentro con esta maravilla.
¡Yo amo el terror!!! (OjO: En la literatura …en la vida real NO, y ni siquiera en el cine …solo en Lectura …y sí que lo amo!)