Me alegra que los disfrutes, compañero.
Un abrazo fuerte, Eusebio!
Una auténtica pena, nos abandonó una gran poeta. Queda su hermosa obra.
Gracias por la visita a mis versos, compañero! Abrazo.
Bienvenido a mi rincón.
Gracias por tu comentario, Gabriel!
Un saludo, compañero.
Hace tiempo que tenía ganas de escribirlo… Huidas hacia adelante…
Gracias, Silvy!
Gracias, amiga!! Hay tardes que se prolongan y prolongan…demasiado.
Besitos fuertes!!
Gracias, mi guapa!! Besitos dobles!
Y la mía para ti y tu poesía! Gracias, amiga!!
Gracias, Alda! Mucha lluvia por dentro…
Un abrazo grande, amiga!
Gracias, amiga! Creo que tenemos una conexión especial las dos, nuestros poemas nos llegan muy adentro!
Abrazo grande, guapa!
Yo también lo pienso, amiga!!! No me cabe duda! Abrazo enorme!
Por cierto tenía una compañera de trabajo, con la que me llevaba muy bien, que era de Madrigal de la Vera.
El último pueblo de la Vera, cercano a tu provincia, sur de Gredos. He estado muchas veces por allí, volveré cuando pueda. Ahora también nevó y he visto fotos maravillosas!!
Han sido muchas las poetas que decidieron interrumpir su camino. Siempre hay algo de niebla en la mirada de un poeta. Tu preciosa foto transmite paz y esperanza. Maravilloso poema para leer después de un tiempo apartado de este rincón de poesía. Abrazos!
Bellísimo y un homenaje precioso mi querida María.
Besines y florecillas.
“El corazón, un cuerpo
de granada que se abre
con rumores de corriente”…
Demuestras una vez esa hermosísima sensibilidad en tus versos, y con la mención a la vez de tanto buen poeta con sus tremendos finales, esa sensación de vacío, esa sensación de que a nosotros solo nos diferencia que estamos en suspiro del tiempo.
Aprovechemos este instante, por ejemplo voy a releer tu poema . Abrazo gigante.
Cierto, todos los poetas tienen algo de niebla dentro…
Me encanta volverte a encontrar por aquí, amigo!!
Gracias, Rafa! Un abrazo fuerte y espero leerte ya mismo.
Gracias, guapa! Flores también para ti!
Gracias, Magdalena! Un beso
Gracias, amigo!! Me alegra enormemente encontrarte por aquí!
Abrazo fuerte para ti !
Saludos María, que poema tan grande, más allá de su belleza y sus metáforas, nos recuerda que a veces ese dejo de tristeza que a veces inspira a los poetas, a veces los desborda, me hace recordar uno de los primeros poemas que leí, “el nocturno a Rosario” que dejó Manuel Acuña como epitafio a su amor imposible, me impresionó tanto que aún está en mi memoria, lo mismo ha de pasar con estos versos tuyos.
Grande amiga felicitaciones