"…Pase lo que pase mañana,
debemos vivir el hoy…"
Vivamos el hoy.
Que sea intensamente
y sin recuerdos.
Sintamos al sol
llegar, por las mañanas,
en la jornada.
Y que ésta sea
el flujo y el reflujo
de nuestro día.
Día con vida,
que salga en los latidos
del corazón.
Y que perdure
el presente ante el pasado
y ante el futuro.
Vivamos el hoy
y obviemos el futuro
con sus promesas.
Porque los sueños
son premios y regalos
de este presente.
Cada segundo
importa, en su momento,
y hay que vivirlo.
Sentir la brisa,
el beso del salitre,
cerrar los ojos.
Y hasta volar,
ahora, en los latidos
de este poema.
Rafael Sánchez Ortega ©
11/05/25