Viene conmigo y como se viene el anochecer sobre la ciudad.
A su paso, quejidos indecibles de unos ojos somnolientos cubiertos con un par de pedazos de cristal.
Le rogué que me dejara ir por la cena.
Esta noche comeremos sueños que renacen. Caminando por el viejo piso, dudando si salir por la puerta o enterrar los deseos de comprar para alimentar un espíritu deambulante, ansioso de aterrizar.
Y un día al anochecer, se irá la luz que brillaba para unos cuantos.
Y brillaremos con la penumbra de la milenaria noche que abraza especies diferentes a las diurnas. Me gusta una palabra que citan los grandes autores, la llaman la noche de los tiempos.
A veces se hace corta, pero siempre nos da un adiós suficientemente oportuno, justo antes que nos pueda hacerla olvidar.
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Es una excelente prosa toda.
Esta noche comeremos sueños que renacen. Caminando por el viejo piso, dudando si salir por la puerta o enterrar los deseos de comprar para alimentar un espíritu deambulante, ansioso de aterrizar.
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@AljndroPoetry gracias estimado Alejandro.
¡Saludos!
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