Yo soy amante de la fotografía y las imágenes gráficas que tanto sugieren, las utilizo mucho para ilustrar los poemas y son ya un poema o una historia por sí mismas…o son inspiradoras para escribirlo, como muchas veces me sucede.
Pero creo, que la imagen que proporciona un poema escrito es más enriquecedora y sugerente para la imaginación…
Precioso tu poema, Carmen! Me ha encantado!
Te imaginé…cámara en ristre por la montaña!
Un abrazo!
Si, estamos de acuerdo. Nada hay comparable a una poesía. Puede ser corta, da igual. Dos versos pueden trasladarnos a los más profundos sentimientos, pueden hacernos visualizar una verdadera historia, pueden comunicarnos la alegria o el dolor del autor en tres segundos…
No sé dónde leí que la poesía es pintar con un pincel fino y delicado. Me encantó.
La fotografía es otra cosa, es cierto. Puede ser la rapidez del momento u horas de perseguir lo que buscas: también poesía. Yo creo que la diferencia está en la forma de mirar. Un poema lo lees y si es bueno te llega al alma, da igual si estás preparado para leerlo.
La fotografía no solo tienes que verla, tienes que mirarla. Cuando haces fotografía, estás entrenado para mirar de otra manera.
En fin, creo que queda claro que me gusta la fotografía jejeje
A mí me encanta la fotografía. Y siendo un arte diferente de la poesía, algunas formas poéticas tienen mucho de fotográfico. La más evidente sea quizá el haiku japonés, que es literalmente, “lo que está pasando ahora, aquí”.
Fantástico poema, @carmen, ¡me gustaría conocer tus fotografías!
Si, de acuerdo Alfonso. Pero que me dices de esa mirada que has conseguido captar en u primer plano? La mirada del padre que lucha por atravesar una alambrada y salvar a su hija del mayor peligro? Por ejemplo. O la mirada de una anciana a través del cristal de su ventana, con el rostro surcado de arrugas y un a ligera sonrisa en su boca?
Como mínimo da para un libro de poesía.
Esa imagen también llega dentro.
Un abrazo Alfonso