Soneto
Ultumátum
Salada espuma lame mis tobillos
con total avidez muy temeraria
acompaña los pasos de adversaria
de herido corazón en los bolsillos.
Se reflejan pequeños pececillos
danzan brillan se escurren cual plegaria
lazando la mirada milenaria
que se pierde siguiendo tales brillos.
Espera una respuesta un resultado
a un ingrato tenaz duro ultimátum
para el triángulo sin querer armado
meditando en la letra y su ultimátum
se agobia el alma y gime por su amado
en esta tarde triste de ultimátum