Tres grados de guerra

¡¡¡Coño!!! ¡Dejé mis pantaletas negras colgadas en el alambre de púas!

Sí, yo a veces —en secreto— me visto de mujer
sólo por el placer de entender sus raras poematicidades
sus grados de guerra
esa forma tan particular de sentir el placer
donde al orgasmearte
el tubo en pos de la semilla se te parte a tres tablas
porque a las mujeres
el placer les llega
y con un sólo jalón desde adentro
les deja la totona calva
como la nalga de un bebé.

Yo nunca podré entender los tres placeres de las mujeres
esos tres vacíos
sin llenar.-

Chane García.
@ChaneGarcia

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