…
de pétalo en pétalo
y no te confundas de atrio ni de esperma.
Avanza con esa dulzura masculina
tras mis espuelas digitales de aroma y lluvia
enreda algunos trémoles
en mi café mañanero
y detén el violín insensato que se tose con la humanidad
cae en mí
cae en ti, en la segunda persona del plural
como categórico
abrígame hasta el latido y áspame delicioso
Y como haz de la noche
baja tu mano a la mía y haz que se trencen las estaciones
con las uñas clavadas en las pupilas
de tanto amor que recogemos de la puerta del invierno.