Todo viene del aire:
las palabras, los besos,
las ausencias, la contaminación
y el vino, también el se fue
y el vacío que deja el no vino.
Llega del aire el recuerdo
y se va la memoria, lenta,
como los atardeceres de verano.
….
¿Y el futuro? Impalpable nube
de forma cambiante,
a veces lluvia, a veces sombra.
Todo viene del aire:
la brisa del mar, la prisa,
la risa, las costumbres y el silencio.
….
Del aire llega el aire compartido,
la grieta que se hace viento
donde gritan el rastrillo y la guadaña.
En el aire se borran las fronteras
y se levantan muros de ignorancia.
Por el aire viene la manzana de Newton
y el tren con sus pañuelos y maletas.
Yo, en el aire… vuelo… escribo… vivo.