Te extraño,
te pienso,
te llevo dentro.
Te revuelvo en mi tequila
con limón y sal.
Te tengo y te sostengo.
Es un hábito de ti que no se calma,
un deseo infinito de habitarte.
Llevo varias lunas pensándote
y varias copas bebiéndote.
Nunca algo tan dulce amargó tanto
y, sin embargo,
sigo enganchada a ti,
como abeja libando la flor que la mata.
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Para mi ha sido un placer enorme escribi contigo, y para ti espero no sea la ultima vez.
Muchas gracias
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Tali
2 Abril, 2024 06:43
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Qué bueno leerles, en un poema lindo. Un gusto de lectura.
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gracias por pasarte y leer
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¡Par de divas escribiendo en una misma página!
No solo quedó bonito, sino también con argumento de peso existencial. Lo aplaudo por partida doble —(Bis)
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muchas gracias por ese lindo comentario
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Bonita colaboración! Felicidades a las dos.
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