He atravesado
tan oscuros senderos
y he muerto en mis ojos
tantas veces…
que vivirme sin memoria
es lo que quiero…
ansiando ese silencio
íntimo,
melodiosamente blanco
que nace entre los hilos de lo nuevo.
He sido,
me he perdido…
me he dolido y lamentado
tantas veces…
que perderme entre los vientos
es lo que anhelo,
sin recuerdo y sin sonidos,
sola y descalza…
en esta nada espero.
Muy hermoso como siempre.
Es bello leerte.
Versos tan bellos y dolorosos como sanadores y necesarios, “ese vivirme sin memoria” duele en el alma, pero a veces es preciso caminar sola y descalza, amiga!!! 
Precioso y profundo poema.
¡Es muy, muy hermoso!
¡Es como morir, revivir, morir de nuevo, y cansarse ya de todo!
¡Muy intenso! 
Muy bello!! Son tan hermosos esos versos que hilas en las oscuridades…!!
Abrazo grande, poeta!
Y deja que se cuele entre ellos un rayito de sol…
El aprendizaje no sobra pero es cierto que a veces resulta más llevadero
Un placer leerte Carmen
tristeza en tus versos
intensa melancolía
bello poema Carmen !
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y he muerto en mis ojos
tantas veces…
que vivirme sin memoria
es lo que quiero…
...
He sido,
me he perdido…
me he dolido y lamentado
tantas veces…
que perderme entre los vientos
es lo que anhelo,
"
Excelente arranque del poema. Me encantó!!!
“He atravesado
tan oscuros senderos
y he muerto en mis ojos
tantas veces…”
Profundo e intenso poema Carmen. Muy bonito.
Un beso 
Muy hermoso!!! Gran abrazo!!!
Gracias miles, compañera. Beso grande!
Así es, a veces necesitamos caminar solos para llegar a algún lugar… descalzos… para sentir bien el terreno que pisamos.
Muchas gracias, José Manuel. Un placer recibir su visita. Saludos.
Muchísimas gracias por tan sentido comentario. Así es, Alda… es cansarse ya de todo… y refugiarse en un lugar sin memoria (a salvo de todo).Muchos besos, compañera.
Muchas gracias, María… Voy a entreabrir un poco la puerta a ver si consigo ese rayito de sol ansiado… Besitos de luz. 
Siempre es un gran placer recibir tu visita, compañero. 
Gracias infinitas, Alejandro . 
Muchas gracias, Lucía.
Muchas gracias, Horten. Un beso