Soy una pausa
en el disipado instante
de un me quedo
y un me voy,
cuando escribo
esta poesía mia,
para ti,
para él,
para ella,
para todos,
en la trocha
de la existencia,
que en la vereda
seca se queda;
porque nadie la recoge
por ser un paréntesis
en el silencio ilustrado,
por ser…
ese absorto segundo
que se pierde en el quejido,
por ser…
una poesía
sin pretensiones
ni cortejos
ya que simplemente
desea, desvanecerse
en las páginas de un blog
que intenta volar sin moverse,
sobre esa pausa de las prisas,
de este tiempo sin rincones
de hábitos y prioridades.
Soy esa pausa
en las silabas
de un poema
que habita
en el silencio
de las estrofas
de sus versos libres
siendo
una simple metáfora
de la vida
como el suspiró
de un lamento
que se transforma
en una sonrisa
dibujada
en el pergamino
del día.
Pippo Bunorrotri