Soy esa…
que se sienta en la orilla del río
a escuchar la canción
de sus aguas profundas.
Soy esa,
que traspasa el papel transparente del día
y se disuelve al ocaso.
La que a veces escribe con letra torcida,
garabateada,
que es capaz de subir la montaña más alta
o se ahoga en un vaso de agua
y hunde los pies en el lodo y el fango…
pisando los charcos.
Soy esa,
que sonríe a la vida, la que corre
delante del tiempo y se sube a los árboles.
Que se olvida de heridas abiertas
y no se desangra.
La que fluye en el viento
y se bebe los rayos de sol en su copa dorada.
Sendero, trayecto y polvo de los años…
que firme camina por sendas abruptas
plegando sus alas,
asomando a lo oscuro de negros abismos
buscando algún claro.
Soy esa,
que persigue a la brisa y naufraga en sus letras,
la que ríe llorando y llora riendo.
De murmullo y silencios…
un hilo fino de agua que todo lo inunda
la inquietud y la calma.
Soy esa…
marea que te acuna, torrente que arrastra…
Enero 2025
Mi foto: Ría de Huelva y Muelle minero de Riotinto.