No empleemos amigos la violencia
que reine en el deporte la cordura,
que huelga tolerar al cara dura
si en el juego no muestra coherencia.
Que le sirva el consejo de advertencia
y sepa mantenerse aquí a la altura,
si quiere conservar la dentadura
de bute le vendrá la sugerencia.
Pues siendo el ajedrez considerado
un juego equilicual de caballeros
no se admiten farfullos chapuceros,
que al respetable dejen tan pasmado
si presumiendo va de chivichanga
que se merezca un buen corte de manga.