Soneto de la unión

Es tu silencio duro y violento
que a mi boca nula en el instante,
que podrá envolver tan delirante
a mi sombra de polvo y de viento.

Pero hoy al verme solo yo siento,
como la flor que embulle cambiante,
que desde un cielo alucinante
se funde tu fuego con mi lamento.

Te vi, para siempre, entrar fugitiva
en la oscuridad de mi saliva
y en mi pecho blando, de piel inerte.

Te perdí, como nunca, con el tiempo,
cuando nos uniamos en un cuerpo
que al fin cerrado lo selló la muerte.

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Muy bello y sublime. Saludos cordiales.

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De exequias, lo amado… oscuro romanticismo.

Saludos @Desarmando

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Final inesperado, Aplaudo la sorpresivoa conclusión.:clap::clap::clap:

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