Habitar una imagen
asido de la belleza invisible,
en donde las sombras
son el bajorelieve poético.
Es conocer la delgada piel
del murmullo,
del rocío y del suspiro.
En un asalto de nubes
bajo la tierra baldía
sueñas el arribo
de la respuesta.
Pero las sombras duermen
junto al latido,
junto a los escombros
de noches soñadas.
Marcelo Osorio
03/10/2020