Escribo,
palabras como hormigas
buscando alimento, atropelladas,
dispersas, tropezando por el blanco
del papel. Lo manchan, lo emborronan,
duelen e iluminan; a veces no respiran,
casi muertas.
….
Preciso un hilo que engarce las palabras;
un hilo que se adentre por mis ojos
y en su soledad cóncava resuene la memoria.
….
Levanto la mirada, escribo.
Simplemente y magistralmente engarzar todas las palabras para crear una historia, para dar a luz al libro como un artesano, con tiempo y amor, poeta!!!
Precioso poema, cómo te entiendo, a veces las palabras se rebelan…a su libre albedrío.
Ese hilo que une y a veces se rompe…
Gracias, por participar en nuestro Reto del Libro!
Un abrazo fuerte, amigo!
Ideas dispersas, miradas, asombros, recuerdos… que tenemos que acabar hilando para que aparezca un poema, aveces se queda en un descosido. Muchas gracias, poeta.
No es fácil hilar las palabras para que puedan dar un sentido.
Muchas gracias por estimularnos con estos retos. Y gracias por tus poemas y tus comentarios.
Cuídate. Abrazos, María 
¡Qué excelente! He releído el poema. Y me he embuido de su metamorfosis.
Le saludo, grande, y le falicito
Qué metáforas tan bonitas @Rraffa. Esas palabras como hormigas y ese hilo que las engarza… Y esa mirada alta que es tu poema…
Muchas gracias por tu atenta lectura. Saludos.
Muchas gracias por tu comentario, Andrés. Saludos.
Simplemente hermoso, muy bello. Felicidades
Simplemente las palabras se adhieren al poeta con cianoclirato (pega loca) y es necesario que una construcción poética las asista y les de albergue, no es que el poeta maneja las palabras, es que las palabras le crecen al poeta como el pasto a los jardines. Lo aplaudo.
Muchas gracias por tu comentario, Sinmi. Buena semana.
Nos crecen las palabras, se enredan por los muros y al poeta le queda la tarea de poner un poco de orden. Gracias, Domingo.
