Se va apagando el amarillo

Jeje… tiene ese aire de algún modo, eh ! Gracias amiga.

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Torcer las palabras según la conveniencia, eh. Agradecido por tu visita estimado Chane, tiempo hacía que no te veía por estos rumbos, es bueno volver a contar con tu presencia.

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Qué hermosura y qué riqueza en las palabras que has empleado.
Sí, a mi también me recordó lo vivido en La Palma con el volcán.

Me ha gustado mucho :clap:t3::clap:t3::clap:t3::heart_eyes::heart_eyes::heart_eyes:

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Me alegra Gali que te guste así. Un abrazo.

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Cosas, cosas que pasan… tenía mis balaustres colúmnicos saturándose de agua perimetral, de agua línfica. Nada que un buen trozo de carne no pueda sanar. Yo a veces me pregunto por qué Dios permite que suceda lo malo, ¿sabes?, el día malo, la precariedad, la carestía… Una persona me dijo: “Tranquilo, Ale; lo malo sucede porque en el fondo es bueno… es lo que tiene que suceder”.

¿El diablo —y sus obras— sabrá que él es, sólo otro de los interminables versos en la rapsodia de Dios?.. ¿él sabe para quién trabaja?

Algo me queda claro: La vida es un contínuo desacostumbramiento.

Saludos.

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