La delicia del mundo,
un chopo y su reflejo
en el lento remanso
de este río de ensueño.
La luz va descendiendo,
dulce y sin prisa, beso
de la tarde entre pájaros
y adormecidos ecos.
La delicia del mundo,
un chopo y su reflejo
en el lento remanso
de este río de ensueño.
La luz va descendiendo,
dulce y sin prisa, beso
de la tarde entre pájaros
y adormecidos ecos.
Una delicia este bello remanso!
Habita la paz en él… ahí quisiera estar.
Buenos días!
Gracias. El verano siempre es hermoso y nos reconcilia con la vida. Un saludo.
Muy bello tu poema.
muchas gracias. Es el poderoso influjo del verano. Un saludo.
Que bello, la verdad que has plasmado ese remanso con esa mirada profunda y sosegada de tus versos, poeta!!!
Gracias. El verano es la estación precisa para el sosiego y la reconciliación. Un saludo.
Precioso. Felicidades
Muchas gracias. Me alegra que te guste. Un saludo.