Si mi cuerpo me diera los mensajes
que entre bromas y veras necesito,
no exhorto ni deseo requisito
que a reforzar me obligue los blindajes.
Pues cada día aparto los celajes
de mi planteamiento favorito,
si de mis puño y letra manuscrito,
se excluyen tan pesados equipajes.
Porque salir no quiero yo en las fotos
que igual me impidan ser fiel y sincero
al usar la razón como herramienta,
sin antes ocultar aquellos rotos
que de moda andarán en candelero
si con tesón mi alma no se enfrenta.