No quisiera arrepentirme…
cuando apenas quede un hilo transparente de mi vida,
el no haber acometido todos los cambios profundos, o al menos participar, colaborando activamente,
sintiéndome esencialmente útil,
en la transformación, eternamente necesaria,
de este convulso, egoísta, potencialmente narcisista mundo, en el que nos han regalado la maravillosa experiencia de disfrutar, todos y cada uno de los exquisitos elementos que conforman nuestro planeta.-
(Cada uno tendrá su particular respuesta de cómo hemos llegado hasta aquí).
No quisiera arrepentirme…
cuando el claxon de mi historia suene por última vez,
el no haber abierto mis venas e impregnarme de tantas cosas sencillas,
simples, sin precio, sin rebajas, sin tarjetas de crédito, ni bancos, ni financieras…
que sólo el corazón, el alma, es capaz de comprender,
de vivirlas con tanta intensidad,
como una simple y entrañable mirada de nuestra mascota, el canto de las cigarras,
el trino de algún jilguero, el volar de mariposas,
cuando una triste, dulce y melancólica melodía, nos desgarra por dentro y hacen brotar lágrimas que recorren nuestras mejillas,
o cuando el jazmín perfuma el aliento del aire en primavera.
No quisiera arrepentirme…
de no haber amado en abundancia,
todo lo que me es afín e incluso y con mayor intensidad todo aquello que me produce rechazo e indignación, por no saber gestionar mi egocentrismo, mi espacio, mi tiempo
y no ocupar todo ese potencial que llevamos dentro, en intentar que se aclaren las conciencias,
que se bañen en el mar de la ilusión, de la esperanza, de la armonía, donde todos somos tan importantes y decisivos con nuestras acciones, que no podemos permitirnos perder ni un solo elemento,
de nuestra flora, de nuestra fauna, de nosotros mismos, de nuestros hermanos todos…
rojos, grises, azules, negros y blancos,
para tan sólo vivir…
y que nuestra dignidad sea menos importante que la de nuestro acompañante,
porque eso es honrar la tierra, porque eso es honrar la vida,
es agradecer este regalo y compartirlo desnudo, sin miedo, sin prejuicios, sin absurdos y gritar con todo el eco de la tierra
que somos libres…
No quisiera arrepentirme…
……