Querer en lejanía

Me mira, la miro;
somos vagas víctimas,
prisioneros de una lejanía
que se lleva nuestros corazones
en el largo río de la impertinencia.

El hilo del tiempo nos sostiene,
paralelos ante las manos del desespero
que nos cruje en la garganta
y escupe en nuestros ojos
su triste y mentirosa desgana.

Me mira, la miro;
la tristeza salta de nuestros ojos,
el hastío se suicida,
el melancólico amor se cubre
de una manta invisible que grita:
«Mírense, ¡qué profundo es su querer!»

5 Me gusta

He vuelto a traer poesía después de un pequeño descanso. Espero que les guste.

Mirarse, no mirarse, el desespero es un hilo muy frágil donde pende la lejanía. —Aplausos.

2 Me gusta

Un poema cargado de emoción y desgarro.

Letras en las que reflejas el amor atrapado en la distancia, con una fuerza palpable en cada verso.

1 me gusta

Cuánta melancolía en estos versos tan llenos de distancia. La distancia vacía y crea versos tan hermosos, como los tuyos. Un gusto pasar. Saludos cordiales. :hugs:

1 me gusta

Muchísimas gracias. Ciertamente, es de esos poemas que duele escribir. :handshake:

1 me gusta

Gracias por comentar, me alegra que te haya gustado un poco de mi arte. Lamentablemente, es de esos poemas que tienen un nombre y rostro, pero que vagan en una lejanía incesante. Es duro cuando el amor se vuelve tan solo una impertinencia… Gracias por tus aprecios.

1 me gusta