Resplandece la luz,
el horizonte aciago
de una herida.
Sin razón, sin medida,
solamente maldad
que se desborda
y aceptación sumisa,
entre un suspiro ansioso
y una falsa sonrisa.
Queda la pena…
…y la herida.
–ALDA–
Imagen: Pixabay (uso libre)
Imagen: Pixabay (uso libre)
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Bello poema que deja un regusto amargo…
Abrazo enorme, Alda. 
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Es triste, si
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Triste y bello poema, Alda.
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《El infierno de Dios no necesita
el esplendor del fuego》 dijo Borges.
Aplausos paisana.
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Sí, era la idea.
¡Mil gracias por tu visita y comentario!!!
¡Muchísimas gracias!
¡Bienvenido siempre!
¡Muchas gracias, querida @mariaprieto!
Creo que no había visto tu comentario… ¡qué vergüenza!
¡Un abrazo fuerte!
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No pasa nada, Alda…no tiene importancia.
Otro abrazo de vuelta, Alda.
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¡Muchas gracias por tu visita y por tu comentario!
¡Bienvenido siempre a visitar mis letras!
¡Un abrazo!