Tres bordados amarillos
en el ribete de la camisa.
El tiempo mató su blancura
y la luz ya se le despinta.
Tres madrugadas frías,
a intervalos se van colando,
por los pliegues de la carne
entra las arrugas y el costado.
Ya no se ciñen los ojos
al vuelo acrobático de las aves,
solo miran horizontes pasados
con las puertas sin sus llaves.
Cinco sentidos tengo
aletargados y tan dormidos.
Solo me queda el recuerdo
del sentir y sus sentidos.
Preludio de día gris
que revoloteas en torno a mi piel.
No me dejas respirar…
mañanita de oscuros versos sin miel.
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Carme
2
Unos hermosos versos que anticipan un momento vital un tanto amargo… Te deseo que vuelvan los versos dulces. 
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Minada
8
Bello ronroneo insistente del inmortal recuerdo en tus expresivos y latentes versos, amiga!!!
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Galilea
10
La melancolía se ha hecho versos. Aquí llueve en otra mañana gris.
Precioso, Horten 
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Rraffa
12
Hay vientos fríos que preludian días grises. Me gustaron mucho las imágenes que van creando esa atmósfera gris. Un abrazo.
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Muchas gracias compañero.
¡Un abrazo!
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¡Hermoso poema!
Esta estrofa me gustó michísimo. ¡Me sentí muy identificada!
¡Bravo, Horten, bravo!
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Esos preludios de días grises que no nos dejan en paz (a veces)
Besitos, 
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Con tu calidad habitual. Un poco de melancolía se huele por aquí. Señardá en asturiano
Los trotamusicos
“ La mejor vacuna contra la melancolía
Es llenar la vida de canciones y de amor”
