Poema XXX

A: Tania y su asombro en aquel parque de Güines.

Tu y yo quizás no seamos la misma cosa al final de la calle,

Ni el mismo boleto de un tren que aún no ha salido;

Tu y yo quizás no seamos la misma lluvia

Ni el paraguas,

O la acera salpicada por los mismos autos.

Aunque quizás Tu y yo si podamos ser el mismo beso,

La misma sonrisa y el mismo océano interminable.

Creo que debemos escoger,

aun sin sacrificios de puntos de vista

Ni madrugadas sin besos robados en un parque cualquiera,

-Si convertirnos o no-

En la misma calle

Parque

Motel de carretera

Sándwich deforme, -pero con patadas de sabor-

Rosas cortadas con mis dientes

Dientes de león y vientos ciegos que deciden.

Tu y yo quizás no seamos la misma cosa al final de la calle,

Ni el paraguas,

O la acera que me mira de reojo.

Pero quizás podamos ser

El mismo beso dejándose robar en un parque cualquiera,

La misma madrugada de hotel,

La misma oportunidad de intentarlo.

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