“Hay una luz y nunca se apaga”
The Smiths
“Tu cuerpo bailaba, mi cabeza se enroscaba”
Usted Señalemelo
Yo anhelo perderme en las pecas de tu rostro
como un pájaro pipiolo en senderos ignotos.
Yo anhelo ser esquimal allá adentro de tus ojos glaciares
como un peatonal atlante en avenidas moleculares.
Yo anhelo lanzarme en el tobogán que es tu cabellera de otoño
como un niño curioso en nevados de brillitos como gnomos.
Yo anhelo ser infinidad intrusa al toque de tus lunares
como un mural pintado para que lo atraviesen los pesares.
Yo anhelo que la Rima se me acabe
y que mejor nazca de tu Baile,
y que mi alma no se haga agua
cuando ¡pum! llegas, y haces todo agua,
y que mi ansiedad no me delate, otra vez,
y que tu hechizar no me delate, otra vez,
y que tu ir y venir no me hipnosis,
y que tu hacer y deshacer no me mitosis,
y que tu abracadabrar no me haga acalambrar,
y que tu sonreír no me haga sobrevenir,
y que tu quieras que yo te quiera
y que tu pienses que yo te pienso
y que tu rías que yo te río
y que tu ames que yo te ame…
Ah recordada
hace nada olvidada mía,
tu pelamen de hojarasca agosto
cae cual metecobre llamareoso
sobre los manteles bordados de girasoles negros de mi comedor redondo
¡de hace ya mucho!
y que no me diste ni tiempo ni tregua ni plazo
para mandar a hacer y a bordar otros nuevos y llanos
y ah en la atmósfera ártica de mi cielorraso vacuo despliegas mi hornera tus hojas en llamas carmesí
y me incendias en un abrir
el cobertor antisísmico de mi santuario a ti…
Ah…
El alma vagabunda del Insomnio:
un murciélago que busca un vampiro
un ultrasonido empaña oídos.
El alma trotamundos del Insomnio:
un ciego que busca una sordomuda
una réplica aguda
un llanto de ayuda.
El alma trashumante del Insomnio:
un cardumen que busca un arrecife de coral
una agua y una sal.
Ah…:
El alma de mi Pasado persiste en recordar.
El alma de mi Futuro se hamaca en utopías, ¡jovial!
Y el alma de mi Presente no se decide, pero escribe; no se decide, pero ¡sí exige!
Ah…
¡Ah…
¡¡Ah…
Y pareciera que: mi Trinidad
no fuera en realidad
mi unicidad,
mi penalma,
la célula de mis células.
Ah… y pareciera que: me deshago de tritonos
y de tridentes ¡tan fácilmente…
Porque mi Alma está atada a otro tiempo;
a otro tic - a otro tac:
bellidio Tictac.
Mi Alma está en soga,
engoznada,
está enpalomada
a un vientrecillo de olunas,
secretamente: rierino.
Ah mi Alma está sedienta…
babea, esperando a ser rociada
por un llanto demente,
un llanto de muerte y creación
de vida y destrucción!
ah mi Alma ansía ducharse…
al menos salpicarse
por un niallágara arcoíris
para seguir siendo lo mismo: mi Alma.
Ah espiritusanto
Ah espirituréprobo!
Oh homme spirituel!!
¿Qué será del Alma en las manos del Amor?
¿Qué será del Cuerpo en las garras de la Pasión Indestinada?
Ni idea…
mas no cuento el Tiempo
del tiempo al tiempo
de espera
por querer contemplar esa sonrisa llena
que sin duda alguna despelleja
el latipulso de el Tiempo
del tiempo al tiempo
de espera
en la barandilla de mis achinojos
que desde hace ya mucho
no son mis ojos,
mis anteojos,
mis ciegojos,
no, no son…
¡porque son de Ella…
Ni idea…
Ah… mi Alma está definida por Ella,
por su pensarlo, por su inconspensarlo,
que sin notarlo,
mis hilos aún la siguen buscando: aún pueden,
aún porque Ella aún
no ha cambiado al brusco
su paso
por las orillas del Mar
que se rinde como buen felino a sus pies
y a su Alma
que pronto, ¡ya todos sabemos!:
ha de despertar
de su semisueño rejuvenecedor
y singular,
y que ha de alzar vuelo
hacia el crepúsculo incierto y
antepensado
por Ella.
Ella, un musical.
Ella: Viva en el Tiempo;
¡Viva en todo tiempo!,
¡¡Viva en todos los tiempos!!,
¡¡¡Viva Atemporal!!!:
Diosella…
Lilitella…
Evaella…
Circella…
Cleoella…
Virgella…
Isisella…
¡Isabella!
Estrella…
Centella…
Marbella…
Solella…
Olivellla…
Castella…
Santaella…
Corella…
¡Doncella, Doncella!
¡¡Geanella, Geanella!!
Siemprella…
Infiniella…
¡Grosella, Grosella!
Todoella…: destella,
deja siempre tu huella
en mi dentella, ¡sé siempre mi querella…
¡no lo hagas… ¡no lo pienses…
¡Ya lo haces!: Tan lejos en el lejos imposible ¡ya lo haces!:
Vas encantando al Mundo entero
con tu almaura aúrea
y con tu volar melifluo de alicanto en cobre;
y vas tejiendo al paso de tus puntilleos inseguibles
a los bailarines invisibles del tornavergel del miopecho
claramente:
intraducible.