Qué bonito, bonito. Suscribo lo que te han dicho: “me arrodillo ante la inmensidad de tu todo” o lo cambio ligeramente: “Me arrodillo ante todo lo que escribes, es inmenso”. Aplausos , Walla
Pienso que las estaciones de trenes, los aeropuertos, los puertos y las terminales son los lugares más sinceros. En esas despedidas nos dejamos más de lo que podemos dimensionar y como es posible de esperar: todo hola es un adiós esperando suceder…
Tu poema es tan bonito como que te midan la cintura con el ancho de un abrazo… gracias preciosa maga de las letras…