On-Off

(Relato en colaboración: Primera y Segunda parte)
Por @Saltamontes y @Ludico, en poemame.com - publicado: 22/05/2019

(I)

Mi amigo Hermes, desde pequeño, fue muy dichoso y agraciado. A eso contribuía su carácter e imborrable sonrisa. Buen conversador, sumaba a esa gracia, la facilidad de tener para cada ocasión un chiste oportuno capaz de despertar hilaridad en sus interlocutores. Le sobraban amistades de ambos sexos que se disputaban la oportunidad de compartir con él: , solían decir todos. Entre las féminas, era considerado todo un galán, por la sutileza de sus requiebros; a todas les caía bien, pero ninguna lo tomaba en serio. El sufría que no creyeran en sus sentimientos cuando se los expresaba a alguna. , pensaba.

Cuando se enamoraba, se entregaba a fondo, pero siempre ocurría algo que echaba por tierra sus sueños. Así pasó con Amparo, la mujer más linda y codiciada por todos los hombres del barrio. Hermes la conquistó pacientemente, en secreto y con mucho trabajo, porque prácticamente era un imposible. Era la esposa del jefe de la policía. Ella lo instó a que buscará un lugar, lejos y reservado donde pudieran consumar el primer encuentro amoroso. Él consiguió que un amigo le prestara la casa por dos días, porque, aunque con Amparo estaría solo unas horas, requería ambientar con sublimidad el paraíso dónde el éxtasis fusionaría sus cuerpos.

—En este sobre esta la dirección y la llave, mi amor —dijo poniéndolo en sus manos y agregó — ¡Mañana al mediodía!

—Solo si se acabara el Mundo no fuera.

Con la ansiedad marcando los latidos de su corazón, Hermes degustaba un daiquirí a sorbos mientras escuchaba “The One Thing” de Michel Bolton. El reloj marcaba las 12. Desde la butaca en que estaba sentado, al sentir la llave en la cerradura de la puerta…, llenó sus pulmones de aire y se puso de pié con la mirada encendida por una felicidad que se apagó al instante. En la puerta, el marido de Amparo blandía en su mano la pistola.

…Como un bólido, en Hermes instintivamente se cumplió la ley de acción y reacción en sentido inverso. Los disparos del arma impactaban en el techo y las paredes del recinto, desviados por la fuerte presión y movimientos de sus manos sobre la que empuñaba la pistola, hasta agotarse las balas; si usted quiere conocer el desespero, aguarde ver a un hombre luchar en defensa de su vida, y si quiere ver al demonio, lo invito a presenciar la venganza de un hombre mancillado,

porque el demonio no solo representa maldad, también es una serie de interacciones erráticas, donde la rabia comanda todo vestigio de racionalidad y cordura —de no ser de ese modo, Satán no sería el segundo al mando en la tierra—

(II)

Hermes, el de los dulces labios, el “latín lover” causante de mil desvelos, arrebatador de suspiros, y buen bailarín, seductor natural, incólume a la tristeza, y amigo nuestro incondicional, jamás había sentido tan cerca los pasos de su propia muerte. En la reyerta, como en una danza letal, ambos hombres pugnan por neutralizarse, quemando toneles de energías en cada respiración. La demanda muscular activada por los caudales de testosterona produce una sudoración fría y de un característico olor a macho, uno por el natural y conveniente instinto de supervivencia y el otro por borrar la deshonra interpuesta por la insatisfacción de una mujer hermosa y la impertinente pretensión de un Hermes contemporáneo, que al igual que su homónimo griego, intercediera entre lo mundano y lo divino.

Cuando ya la visión se hace gris por hipoxia cerebral inducida por falta de oxígeno, ambos se desploman manteniendo la férrea unión corporal en los últimos chiringuitos de fuerza persistentes.

Si mi quincuagenaria memoria no me falla, el marido de Amparo se llamaba Genovevo, sus subordinados en la comandancia de policía le llamaban comandante “bebo” — con b alta— mientras que en los barrios más humildes de la Habana se le mencionaba despectivamente como “medioevo”, en los bajos fondos delincuenciales los malhechores le apodaban “el cáncer”, pues según ellos, sumaba en su haber, tantos muertos como la terrible enfermedad. Era un tipo retaco, con aspecto de bonachón, que solía muflir como una vaca, ya que masticaba hojas de tabaco preferiblemente sin curar, tenía un timbre de voz algo nasal, pero tenorizado artificialmente —al estilo de Tito Nieves—

¡Era malo!; —en algún momento les echare sus cuentos. —

Los cierto es que, en aquella ocasión, ambos hombres, exhaustos por los mutuos esfuerzos realizados y la multiplicidad de sensaciones emocionales sentidas en poco tiempo, terminan casi desvanecidos y para no ceder cada uno dentro de su desconfianza, se abrazan arrodillados en el piso de la casa donde se había pautado la cita.

Los seis agujeros en el techo de cinc dejados por los impactos de los disparos desviados dejaban pasar haces de luces como emulando la iluminación en un teatro de pueblo, de esos que mandan a construir los alcaldes de los municipios cuando aspiran la reelección. Bajo aquel efecto lumínico y la efervescencia latente que deja la alta combustión de testosterona, el “matón” y el “galán” se confundían en un abrazo que repentinamente paso de la furia a la ternura, del — si no me matas te mato, a un —abrázame que me pierdo. Y con una banda sonora de bolero invocador de despechos y traiciones, el nombre y la voluptuosa figura de Amparo, van tomando la segundona postura que ostenta el diablo en el imaginario organigrama de la organización terráquea. En el instinto varonil de aquellos dos hombres vencidos por los impulsos de una misma pasión, el interruptor de la destrucción mutua pasa de estado “on” a un momentáneo pero fructífero estado “off”.


Nota: Sé tomará por sorpresa a @ludico1964 , porque se me ha ocurrido publicarlo nuevamente sin haberlo consultado. Fue para mi un honor haber compartido con él ;este trabajo. Espero que lo disfruten.

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Ah qué buen relato. Tenía que ser con sus maravillosas plumas estimados amigos.
No recuerdo haberlo leído antes, aunque seguramente lo hice.

De cualquier modo les aplaudo poetas (quizás de nuevo) :slight_smile:
@Saltamontes @ludico1964

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Gracias alejandro, en nombre de ambos por esa favorable opinión.
Abrazos

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Siempre maravillado por la fecunda pluma de don Pedro @Saltamontes (amigo entrañable y poeta de avanzada). Un grato recuerdo; ha hecho bien en publicarlo de nuevo, muchas gracias.
Espero que lo lea @ARTEMISA.POEMAS y el primo @JDuque .

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Gracias Alejandro, Saludos.

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Sabía reaccionarias así querido amigo ludico, de ahí que lo re-publicara. Aunque realmente no soy poeta de avanzada, disfruté tu compañía en éste relato.Fue un honor compartido.
Fuerte abrazo

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Donde pones la metáfora pones también la sabiduría, tu palabra es comedida y decente y transita por parajes jamás imaginados. —Te Aplaudo.

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¡Sin palabras!
Abrazos

Un buen relato con una prosa fluida​:clap::clap::clap:

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Gracias, poeta.
abrazo

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Quedó bien interesante y bien escrito.

Bravo, amiguitos, @saltamontes y @ludico1964 .

Enhorabuena a los dos.

Esperando estamos un best-seller policíaco vuestro a cuatro manos, je, je…

Y luego lo lleváis al cine, y os hacéis ricos, y nos invitáis a vuestra villa en la costa azul…
Je, je…

:clap::clap::clap::clap:

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Gracias, amiga Artemisa, por la lectura y cómplice comentario, me ha causado gracia por sus estimulantes visiones policíacas al relato… . Lo apreciamos mucho.
Fuerte abrazo

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Excelente narración y descripción :clap:t2::clap:t2::clap:t2:

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Muy interesante tu relato. Enhorabuena. La de formas que el amor toma en la vida y en la literatura. Un saludo, compañero

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Gracias @Jocelyn y @josemanuelperez, en nombre de Ludico y mío. por la lectura y comentario. Nos agradan sus criterios.
Abrazos

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Que impecable relato!!!
No habrá una segunda parte? Pago por ver.
No cabe que dos plumas de maestros hacen cosas sublimes.

Lo leeré varias veces. Estos textos ejemplares merecen deglutirse poligastricamente.

Enorme aplauso admirador @ludico1964 y @Saltamontes !!

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Muchas gracias @JDuque , sucede que escribir con @Saltamontes motiva, porque el hombre es un manantial de ocurrencias y experiencias que le brotan de forma espontánea y con una simpatía absorvente eneo mejor de los sentidos. Con gusto haría una segunda parte. Muchas gracias primo

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Siempre es disfrutable Leer a dos Poetas con sus alcances.
Por supuesto que es un gran trabajo.

@ludico1964
@Saltamontes

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Gracias, Jorge. son estimulantes tus palabras.
Abrazo

Amigo JDuque, Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, aunque no siempre es así. Y si un integral @ludico1964 , por osado e instruido como el, dice que lo haría con gusto, a mi no me quedaría otra cosa que seguirlo, también con no menos gusto. Solo que llevaría un tiempecito.
Gracias por tu lectura y por haberlo entendido como dices.
Un abrazo

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