Noches blancas
al interior de la mente,
ofuscado,
busco tus ojos
encerrados en alambres
como dos ramitas
que cuidan un nido de gorriones.
Busco tus ojos
como las dos últimas estrellas
en el apocalipsis universal.
Todo es salvado,
se desprenden las cadenas
de los dolores incurables;
tus ojos, crepúsculo salvador.