No son felices estas fechas
como lo fueron tiempo atrás
cuando al árbol de la vida
no le faltaban tantas hojas.
Caducado el día de Navidad,
y sólo a un paso del año nuevo,
bajo el cielo de esta noche,
sin estrellas,
observo mi reloj interno,
y veo los años convertidos en horas,
y las horas en minutos,
y la vida en un suspiro.
Se ha borrado la ilusión del porvenir
y por venir, mientras quiera,
seguirá viniendo
y aquí estaré yo, esperando.
El tiempo y la vida pasan los años entretenidos en el juego del gato y el ratón, mientras la existencia se derrama por las costuras de un espacio, en el que nada es lo que parece y sin embargo todo parece real en apariencia.
Bellos versos.
Un saludo.
Gracias por tu comentario.
Feliz año nuevo.
Con escenario navideño nos brindas unas letras cual reloj existencial.
Versos donde el tiempo no promete, pero insiste; el poema es un suspiro detenido en la espera.
Precioso y nostálgico poema, Paco.
Gracias por participar.
¡Feliz año!
Gracias por ese diploma 
Feliz año nuevo
Gracias por tus palabras, siempre tan acertadas.
Un saludo y Feliz año nuevo.
El paso del tiempo causa estragos en el ánimo…En estas fechas se hace un balance involuntario o no, lleno de melancolía…
Hermoso poema, Paco!
Que no se pierda la esperanza…
Feliz Año! Abrazos. 
Gracias por tus palabras, María. La esperanza siempre en lo alto. Feliz año nuevo.