Déjame ver tu amor
lo necesito,
alzo mis plegarias
con la humildad de una motita de polvo.
Escúchame,
mi corazón arde
mis ojos están secos
de tanto mirar.
Dame un abrazo
que tú calor caliente mis huesos
y mis pensamientos
dejen de intentar estallar.
Hoy solo soy un muñeco de trapo
un resquicio diminuto y frío
en lo más alto de la inmensidad.
Sé que para ti no existe nada
que no puedas lograr,
quiero que abra los ojos
pues la quiero amar.
Padre
soy tu hijo menor,
aquel que abre los brazos
pidiendo compasión.
Quiero respirar en los bosques
sentir la brisa del mar,
quiero caminar los senderos
hablar a otros de tu bondad.
Quiero hacerlo junto
con aquella sonrisa
que me ha enseñado a amar.
Padre Jehová yo te amo
y no condiciona mi ruego
a tú absoluta verdad.
Eres el creador del cielo y la tierra
me has enseñado a amar,
soy tu reflejo
es por eso que quiero
reír en vez de llorar.
© Mute, el amoroso 2024
