Buenos días, tardes, noches.
Sé que poco importará lo que diga, pero creo que necesito sacarlo, así que después de muchos días de meditarlo me veo prepaprada para decir que llevo ocho años en Poémame, como autora y siendo también parte del equipo casi desde sus inicios. Hemos trabajando en la sombra para tener un bonito espacio, con calidad, complementado con una revista donde incluso publicamos artículos sobre poetas de la Comunidad. Es un trabajo que aunque parece una memez, precisa de tiempo y dedicación, y aunque no siempre la tengo, intento estar ahí para lo que haga falta.
No puedo evitar sentirme tremendamente triste y dolida por lo que he estado viendo últimamente. Debo decir que no es tarea fácil lidiar con la cantidad de personas que son parte de una web de este calibre, con tantos usuarios, tanta diversidad y (que nadie se ofenda, no estoy señalando) a veces tantos egos o tanta intransigencia. Pero lo hacemos, todos los que formamos el equipo, porque amamos la poesía, amamos Poémame y amamos a la gente que está aquí. Y sobretodo, lo hacemos con gusto y con la mejor de nuestras voluntades.
Ahora me he dado cuenta que ochos años de dedicación y tiempo no significan nada. Los miembros de este equipo hemos sido tachados de traidores, de nazis, de no defender los derechos de las mujeres… No voy a repetir lo que ocurrió, bastante se ha dicho ya y todo el mundo aquí lo sabe, pero a veces es bueno tener un poco de empatía, un poco de respeto, y un poco de educación.
Estoy tremendamente triste, decepcionada y dolida por ver cómo ahora de repente somos los más malos del mundo por no haber expulsado a alguien que se equivocó, que rectificó y se disculpó.
Los que os habéis ido, por supuesto, sois libres de hacerlo, pero necesitaba decir que por nuestra parte no es pasividad, no es distancia ni ligereza a la hora de tomarnos las cosas. Pasamos muchas horas hablando y debatiendo qué dirección tomar, qué acciones tomar, siempre pensando en el bien de la Comunidad y que los usuarios y usuarias estén a gusto aquí. Si ha llegado el momento en que algunos no lo están, son libres de irse, sólo faltaría! Pero somos humanos todos, y hay diversidad a la hora de ver las cosas. Enfadarse porque algunos no están de acuerdo con lo que uno piensa y ponerse absolutamente en contra, hasta el punto de insultar y agredir verbalmente (os digo que a mí me han herido más algunos comentarios que he leído que el propio comentario de la discordia), me deja absolutamente derrotada y casi se me quitan las ganas de seguir luchando para que Poémame sea un espacio agradable y bonito para todos y todas.
Nunca llueve a gusto de todos, pero no por ello hemos de crucificar las nubes.
Dicho esto, cojo mi tristeza y mi decepción y me despido para no molestaros más, no de la web, no del equipo, me despido de este este post que sé que no aporta, pero me hacía mucha falta decir.
Matizo que, aunque somos un equipo, estas palabras son solamente mías, la escribo como Ze, no en representación del equipo de Poémame. Así que si alguien se siente ofendido o atacado por lo que he dicho, que vaya contra mí, no contra los demás miembros.
Os mando un abrazo y os deseo un feliz verano.