Darle a nuestro amor candela, es lo que a ti te conviene
cuando aguantarte tranquila, noche y día tela tiene
que no existe terremoto, ni vendaval que te frene.
Porque si lo que pretendes, me lo ocultas a menudo,
ya sabes que yo glosando, en público me desnudo,
y de encima los prejuicios, al instante me sacudo.
Cuando conviene que sepas, que yo complejo de esclavo
a propósito no tengo, que mis trapos sucios lavo
a gusto en mi propia casa, como el perro mueve el rabo.