Mi vida por un libro, y no muerte apenas, sino existencia total hasta el infinito.
El que leo, el que escribo, el que quiero ser desde que aprendí a vivir entre líneas.
Mi absurda existencia de temeroso creador de dioses, impregnada en las hojas.
Clamando por ser autor de una comedia de flagelos morales hasta el hastío.
No una novela ni un pasaje de la creación de la humanidad, sino apenas un epitafio.
Para todos los malditos poetas que murieron bien siendo unos desgraciados.
Un libro para devolver del suicidio a los que dejaron su obra inconclusa.
Y en él, yo, provocando a las palabras cada salto de línea, cada vuelta de página.
Mi vida entre dos tapas, reuniendo las horas dejadas en cada sorbo de café.
Mirando una y otra vez los atardeceres colorados que pintaron mi cielo de cristal.
Rodeado de ajadas voces que me pedían que publique para ocupar su lugar.
Uno y no muchos libros reunidos todos en él, resumiendo la totalidad de las cosas.
Y yo aquí, esperando con mi pulmón en un sobre, a que el editor me llame.
Mi vida por un libro y no uno apenas, sino muchos más, que pagaré con mil faenas.
Los que se han dormido de tanta espera y los que esperan iluminación terrena.
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Que reflexión más intensa, más profunda y más amante a esos libros que encierran vidas enteras, muy apasionante poeta!!! Saludos!!!
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Muy agradecido por sus palabras poeta.
Magnífico, maravilloso, demasiado bueno, especial
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Gracias por tan valiosas palabras poeta.
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