Mi patria, dos balcones
que miran a la plaza;
geranios, y esta luz,
tibia, de la mañana.
El silencio, tan denso,
el perfil de gastadas
voces en la penumbra
de las cosas amadas.
Viejas fotografías,
las flores enmarcadas
que un día fueron todo
y ahora no son nada.
Los rostros de otras veces,
música de fantasmas
entre los viejos libros
que defienden mi casa.
Una patria vivida,
la silueta cantada
de otros himnos, de risas,
de vida enamorada.
Esa es toda y nuestra más querida patria amigo @Pradoalto, y con esa nos basta!
Muchas gracias. Esta es nuestra vida y nuestra patria verdadera; todo lo demás es una mistificación. Un saludo.
Cuánta melancolía en esas bellas letras!
La patria que nos queda…la enmarcaste bien en este magnífico poema! 
Saludos en esta mañana lluviosa, muy apropiada para leer tu poema.
La patria más auténtica, la que nos roe el alma y los huesos, amor y melancolía, poeta!!!
Tienes toda la razón: no hay más patria que esa. Muchas gracias. Saludos.
Esa patria es lo único que nos queda. Cuánto sentimiento en esos versos tan bellos. Encantada de leerte. Saludos cordiales.
Muchas gracias. Esa es la patria de verdad. Un saludo
La Patria, amigo, la has enmarcado y llevado sentimentalmente al hogar y sus contornos de forma
muy original… Allí, como dice la canción, si hay fuego y vino todo es ideal, está el hogar idoneo.
Felicitaciones.
Abrazo
Muchas gracias por tu comentario,tan acertado. Un afectuoso saludo.
Gracias a tí, amigo.
Abrazo
Muy bello.
Enhorabuena.
Muchas gracias. Me alegro que te guste. Un saludo.
Gracias por tu comentario, siempre tan amable y acertado. Saludos.
Solo creo en este tipo de patria, gran poema.
Un cordial saludo.