La suma de deudas
absurda la cuenta
se vuelve tediosa
y hace de Dios otro loco
proclamando su nombre
porque alguien lo invoque
de donde reposa
hacia parajes sin código,
una frecuencia a mejor
que nos decora de flora el corazón:
oh gloriosa curación
cuando más fosa hay para los dos
en esta inopia
transitoria a darnos gozo.
No me escojas entre los otros
salvo si no es con un motivo lógico
de sacar mi barco a flote
escapándole al error que me soporte
sin más opción que naufragar
perdido a solas
del horizonte que consuela
y de la buena canción
cuya factura supera todo mi don
(maldita tristeza.)
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Has encriptado el poema de tal manera, que se hace difícil penetrar al núcleo del dolor, mas allá del sufrimiento…pero me ha gustado mucho.
Te contesto con unos versos que hice para mí hace muchísimos años en una situación tremenda y repetida, de hecho se llama autorretrato y hoy es una canción.
“Y saldrás del agujero para entrar en otro nuevo…ya ves ,
llegarás junto a la luna que se bañaba desnuda…
juegas con inventos que el tiempo no adivinó”
Saludos y ánimo, nada es fácil
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