Como una cuerda de presos
en caravana salieron
mala suerte en el sorteo
eran los quintos del pueblo
se alejaban de sus casas
dejaban atrás su tierra
iban a ultramar, decían
pues eran tiempos de guerra
mostrad coraje y valor
arengaban en el barco
regresaréis a la patria
de gloria y honor colmados
la Perla de las Antillas
era ya tierra quemada
los que ayer eran hermanos
les odiaban hoy con saña
no les doblegaba el miedo
ni la furia del machete
los diezmaba la malaria
y la pena del ausente
que sólo serán tres años
mascullaban los paisanos
si la suerte lo permite
puede que algunos volvamos
tras el tiempo convenido
arribaron derrotados
llegó uno de cada cinco
los demás, allí enterrados
no nos ganamos la gloria
tampoco ningún honor
contaba el abuelo al nieto
en tanto atizaba el fuego