Cuántas cosas mi amor de ti conservo
si un beso tuyo hasta la boca llega,
al ver así que en mi interior reservo
cuanto en el exterior hoy se me niega.
Sé que escribo sin juicio ni cordura
al pulir cuanto puedo la emoción,
porque al pagar muy caro la factura
con las sospechas callo la pasión.
Pues hoy sin voz acallo los amores
y busco dónde calentar el nido,
buscando que se alivien mis dolores
al verme de favor correspondido,
que yendo por el mundo tan liviano
acusarme podrían de villano.