Llega la paz
Suenan estruendosos villancicos,
luces abigarradas, cegadoras
iluminan las tumultuosas calles
transitadas por compulsivos compradores,
pisoteando, empujando, creyendo…
en la necesaria felicidad.
¡ser feliz en navidad!
Las casas llenas de trastos
supuestamente inductores de dicha.
Se escucha el eco de noche de paz,
paz de la que se exime
a esas resignadas mamás
cociendo, cocinando, preparando
siempre para los demás
para los beodos llegados a mesa puesta
rebosantes de agresividad.
La mamá los mira,
la mamá los mima
desearía salir corriendo
llamar al hada buena
que limpiase los cacharros
cansados ya de cocinar.
Atracones de comida,
de la cara,
la más inmortal,
tanques y tanques de bebida,
regalos fatuos,
luces artificiales
sustitutas de estrellas de verdad.
Muere la navidad
aquí comienza la paz.
Checha, 6 de enero de 2025
Imagen: el periódico