Cuando dejas de amar la vida
dejas de ponerle esa ilusión,
la que hace despertar la lira.
Se caerán tus pétalos al vacío,
no oirás el preludio de la danza
y no habrá nunca nuevos desafíos.
Serás pájaro muerto que dormita
entre los fantasmas de estatuas
y solo Matrix será tu compañía.
Plástico áspero ausente de caricias
porque la vida está siempre delante
y es donde encontrarás tu serendipia.
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