Los limones abandonados a su suerte, ni se aprovechan ni siguen el curso de su destino, simplemente permanecen ahí, como un bodegón de naturaleza muerta. Que desperdicio para la vida y que pena, la huella que sobre ellos deja el tiempo.
Que manera de decir lo indecible @Checha , no solo bellezas en la transcripción, sino una mirada crítica consciente que revela tu alta capacidad de observación —te dedico un aplauso y un beso como saludo a modo de admiración.
Una hermosa metáfora de la vida son esos limones abandonados a su suerte…que nadie recoge. Tu poema tiene mucho fondo…
Enfrente de mi casa hay un caserón viejo y noble que tiene un jardín que un día fue hermoso y desde mi azotea, veo los naranjos y limoneros con sus frutos cayendo en la maleza de los parterres…igual que en tu poema.
La vida…que se deteriora con el tiempo.
Me gusta encontrar tus letras por aquí de nuevo, mi Checha! Abrazos enormes!
Nada más triste que la belleza cuando se marchita por haber sido abandonada. Nada más cruel que la vida segada en su plenitud por una maldita bomba.
Tu poema me ha llevado a Palestina irremediablemente. No sé si esa fue tu intención o son cosas mias. De todas formas, el poema es de los que hay que leer más de una vez y en cada lectura gana.
Saludos, Checha.