Libres celdas cobijan unas alas,
baten el aire como cuatro palas,
sobre el agua, de agitadas, se irisan.
Unos juncos inquietos las divisan,
sus cabellos descubiertos alisan
coquetos, a las orillas concisan.
Bajo el vuelo el lecho fiel, transparente;
el líquido tranquilo, sin corriente.
La libélula se posa, y sus galas;
las ondas prestas que acuden avisan,
la carpa roja se aproxima urgente.
Te quedó muy rítmico y melódicos tu jotabé pentavocálico.
Poesía escrita con usual maestría.
Saludos cordiales, Juan Carlos!
Me encanta tu poema compañero: está muy buena la descripción y la rítmica, y la variante, que según entiendo consiste en plasmar todas las vocales en el verso, también la observo en este escrito.
Saludos
Muchas gracias Profesor, es para mí una gran alegría su visita a este jotabé que tiene a la libélula como protagonista. Un cordial saludo!
Exacto compañero este jotabé consiste en utilizar todas las vocales en cada verso, tenía la opción del murciélago pero la libélula es más amable jejeje. Muchas gracias. Un cordial saludo
A qué interesante esta modalidad
Como que hay más variedad de Jotabé que los modos de hablar español en todos los mundos de habla hispana!
Buen poema buen amigo!!
El desarrollo de esta métrica está pensado para no aburrir por hacerse repetitiva, de un poema de 11 versos han hecho 200 páginas de documentación -no os pedimos tanto para los mepi 
-. Muchas gracias amigo, me alegra que te haya gustado esta variante con todas las vocales.
Jajaja 
Cierto!!
¡Excelente!
La verdad, creo que es más difícil hacer un panvocálico que un lipograma.
¡Te aplaudo, de pie te aplaudo!
He tenido que re-pensar algún verso pero te puedo decir amiga Alda que usamos las cinco vocales con más frecuencia de lo que se puede pensar. Con el ‘que’ ya usas dos. Es verdad que basta con que te propongas hacer algo en concreto para que aparezca el bloqueo😅 pero comparándolo con el lipograma pienso que éste es más libre. Muchas gracias por tu visita. Un abrazo!