[Basado En: El Ruiseñor Y La Rosa - Oscar Wilde]
Un estudiante se lamenta,
Pues una pena su alma atormenta,
Ella a aquella dama,
La que su corazón ama,
Para darle una oportunidad de tener su amor,
Le ha pedido algo que a su mente y esperanza causa dolor,
Un desafío sencillo pero complejo,
Dejarla con el orgullo perplejo,
Ante el detalle más bello.
Una Rosa,
Como ella debe ser más o igual de hermosa,
Pero ¿dónde encontrar lo que desea?,
— ¡que a mi corazón alguien vea! — Suplico al cielo mientras atardecía,
Y su pena más sin freno crecía.
El único testigo de esta gris escena,
Triste al ver como la pena envenena,
Al corazón un de apasionado,
El alma de un verdadero enamorado,
Las notas más bellas de su voz,
No pueden hacer nada contra la pena,
Que arrastra a la profunda tristeza como la muerte y su hoz,
Fue con rosales a buscar una cara la pena.
Pero la respuesta siempre fue negativa,
Y hasta una tanta evasiva,
Rosas blancas y amarillas,
Pero no rojas que serían una maravilla,
El rosal de las rojas más rojas que brillaban cual rubí,
Está marchito del invierno más frió que vi.
Pero con una tal vez renació la esperanza,
Solo había que poner la vida en una balanza,
Dar su vida y todo lo que podía sentir,
Una elección: ¿ayudar a un enamorado y sacrificarse?,
Una decisión: ¿morir o vivir?
Todo para que dos almas al amor puedan entregarse.
El ruiseñor se mostró dispuesto,
Estuvo atento a todo momento,
Con triste y felicidad,
Al mismo tiempo al ver su realidad,
Convertirse en mártir,
Para que dos persona de amor puedan vivir,
Las instrucciones del rosal fueron concretas sin más,
—tus sonetos más bello canta mientras abrázame y morirás,
Tu sangre y canto haré míos junto a tu vida,
Y de mi rama una rosa perfecta tendrá salida —
Dar su mejor esfuerzo,
Dejarlo todo en un verso,
En una rima dejar el alma,
Todo por una dama,
Pero golpea la verdad,
Recordando que nada vale perder la realidad.
La dama que se añoraba,
Con la que un joven soñaba,
Al ver la rosa más perfecta para ella,
Juntas la imagen de en la tierra una estrella,
Pero el regalo no combina con su vestimenta,
Y demuestra sus intereses en que tanto piensa,
La joya de más hermosa del amor y naturaleza,
La más increíble y hermosa pieza,
Rechazada,
Y una esperanza negada,
Lo más valioso ignorado,
Por cosas vacías que el oro ha comprado.
Una vida por nada,
La luz más claro de luna desperdiciada,
Por una ingrata,
Con un pecho vacío y una mente interesada,
Lo que hoy brilla es el ateísmo al amor del estudiante,
Las lágrimas de la rosa y la risa de una ignorante,
Ruiseñor que en paz tu alma logre descansar,
Pero tu sacrificio no se perderá calma,
Al menos habrá puños y letras dedicados al genuino amor,
Todos viviéramos lo mismo desde alegría hasta dolor.