Las demasiadas voces
Hurgan en mi interior
Para encontrar razones
De su gran sin razón
Algoritmo
O
Muerte
Del levante viene la nada
Único peldaño firme
En el basamento del templo
Donde adoramos a la diosa utilidad
Mientras
Su hermandad de apologetas
Escriben los nuevos códices
Con sangre y destino
Para aturdir lo postrero
Tomé prestada
La mirada del coyote
Melancolía y espasmo
Ante cada esperanza
En su empaque fáustico
Y he decidido dimitir de mi
Diferir mi escrutinio de las voces
Plegarme como coartada
Y negar su supremacía
Cultivando el silencioso habito
De disentir con la poesía